GUÍA DE TALLES
Medir es el primer paso para tener un corpiño del talle correcto.
Necesitamos dos parametros: contorno bajo busto y contorno sobre busto (taza).
1. ¡Cinta métrica!
Para medir, necesitás una cinta métrica o cualquier cinta (después la podés medir con una regla u algo parecido).
2. CONTORNO BAJO BUSTO (ajustado)
Pasamos la cinta por delante, nos fijamos que queda bien ajustada justo debajo del corpiño y tensionamos bien la cinta.
Hay que tensionar bien la cinta porque el corpiño es elástico pero la cinta no. Anotamos los centímetros del contorno bajo busto.
3. CONTORNO SOBRE BUSTO (suelto)
Esta vez dejamos un poco más floja la cinta y medimos por encima de la parte más voluminosa del busto. Insistimos: esta vez sin apretar. Anotamos los centímetros.
4. Ahora con estos dos valores nos fijamos en la tabla cuál es tu talle.


Por ejemplo:
Si tu contorno bajo busto es 105 cm (entre 103 y 107): tu talle es 115.
Y si tu contorno sobre busto es 119 cm (entre 118 y 122): tu talle es C.
Tu talle Helene Fourment entonces es: 115C.


Otro ejemplo:
Si tu contorno bajo busto es 111 cm (entre 108 y 111): tu talle es 120.
Y si tu contorno sobre busto es 131 cm (entre 128 y 132): tu talle es D.
Tu talle Helene Fourment entonces es: 120D


¿Estoy usando el talle correcto? Verificá el talle de tu corpiño.
Breteles:
Los breteles tienen que estar firme pero no apretar ni escaparse. Con los breteles ajustables, podés acomodarlos para lograr el ajuste ideal del corpiño. Si aún así se te caen, puede ser que estés usando un corpiño de tamaño incorrecto. Los breteles de Helene Fourment vienen con diferentes grosores y tensiones según el talle, para brindar mejor sostén al busto.
Contorno:
La parte de abajo del corpiño es la que más soporte da. Tiene que quedar bien, sin apretar. Deberías poder meter un dedo entre el corpiño y tu cuerpo. Y el corpiño no debería subirse.
Tazas:
Las tazas deben estar llenas y lisas, sin que el busto se vaya hacia los costados. Si parecen vacías, es posible que tengas que ajustar la longitud del brete, y si aún así se ven vacías, quizás necesites un tamaño de taza más chico. Si notás derrames en los costados o arriba de las tazas, puede ser que necesites una taza más grande o un corpiño con más cobertura.
Si usás corpiños con aro, los aros tienen que cubrir toda la parte de abajo del busto. Es re importante que no se te claven.
¡El tamaño puede cambiar!
El tamaño del corpiño no es algo fijo. Probablemente no uses el mismo que hace cinco años. Muchas cosas pueden cambiar el tamaño que necesitás, además de la marca o el estilo que elijas, como subir o bajar de peso, el ejercicio o el embarazo. Te sugerimos que te midas el busto antes de comprar un corpiño nuevo.